Una nueva derrota para el dictador tropical... Hoy los titulares de los periódicos anuncian la pérdida por parte del chavismo de la alcaldía de Caracas y las gubernaturas de Zulia, Miranda, Nueva Esparta, Carabobo y Táchira.
Con beneplácito celebró la victoria de la oposición ante la pingüe victoria del oficialismo, que encabezados por aquel aprendiz de dictador, ladrón de siete suelas, asaltante de caminos, encantador de serpientes, agitador de plazas, llamado Hugo Chávez, intenta convencernos, una y otra vez , que el camino para la instauración del socialismo con aspiraciones bolivarianas ya nadie lo para.
¡Por favor Presidente Chávez! Ya no nos mienta, como es una práctica habitual de su gobierno y como parte del montaje falaz de una “pseudo-democracia”, nos dice “La victoria es hoy de Venezuela. Se ratifica el camino democrático que el pueblo ha escogido” (...) -en cuanto a los resultados- “demostraron que aquí hay un sistema democrático y que aquí se respeta la decisión del pueblo” ¡qué cinismo!
Luego de esta escalada de epítetos, descalificaciones, cerrazón y fundamentalismo que produce en mí el Comandante Chávez, ofrezco una disculpa y propongo analizar los efectos prácticos de los recientes comicios caribeños.
A pesar de lo avasallador que puede parecer la victoria del oficialismo en 17 de las 22 gubernaturas puestas en juego, no es menos cierto que la oposición avanza a paso firme y seguro, principalmente, habrá que destacar la victoria en Caracas y de los prósperos estados petroleros de Zulia y Nueva Esparta, sin desmerecer los triunfos en Táchira y Carabobo. En los papeles dan una señal al Presidente Chávez que la imposición de un plan de gobierno no es voluntad unipersonal, por el contrario, existe un movimiento pensante que clama por un hasta aquí.
Muchos se verán tentados por trasladar esta realidad a México, lanzando como principal argumento que el DF y Caracas son puntos neurálgicos y de “ESPERANZA” para el desarrollo de ambos países. No se equivoquen, a diferencia de lo que ocurre con el gobierno de la ciudad, en Caracas existe una oposición que gobernará con responsabilidad, amplitud y disposición para el trabajo en conjunto con el oficialismo, lejos de plantones y protestas que intentan revivir una izquierda trasnochada.
No me queda más que decir atento Sr. Chávez, es su segunda llamada de atención después del fallido referéndum que buscaba entronizarlo en el poder, ¿no será que se trata de la crónica de una muerte anunciada?
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